Afortunadamente para la comuna de Licantén los niveles del caudal han ido a la baja en las últimas horas de acuerdo a las mediciones de la DGA y la observación constante de los propios vecinos, que son los más preocupados.
En su punto más alto, el nivel de caudal llegó a los 1200 metros cúbicos por segundo, situación que ha ido a la baja durante la jornada de este viernes.
Desde el municipio informaron que se están haciendo recorridos constantes por la ribera del Río destacando que, a pesar de la emisión de una alerta amarilla por parte de las autoridades de emergencia, no hay mayor afectación en la comuna. Sin embargo, la crecida del Río provocó la activación del brazo de río ubicado en el sector de Idahue pero que fue contenido por el enrocado que se construyó en el sector.
Con respecto a la educación, el alcalde Marcelo Fernández ha señalado que las clases se retomarán de manera normal a partir de próximo lunes.




