- La iniciativa ambiental se desarrolló gracias a los recursos otorgados por el Fondo de Protección Ambiental (FPA) del Ministerio del Medio Ambiente, con el objetivo de contribuir a la mitigación del impacto del cambio climático en las comunidades urbanas de Talca.
La Seremi del Medio Ambiente de la Región del Maule, Daniela de La Jara, encabezó la ceremonia de cierre del Fondo de Protección Ambiental #FPA 2023, del Ministerio de Medio Ambiente: “Microbosques Urbanos”, ejecutado por el histórico Club del Árbol de Talca.
El proyecto sustentable ciudadano se desarrolló bajo la línea de financiamiento de Cambio Climático y Descontaminación Ambiental del Fondo de Protección Ambiental y contó con una subvención de seis millones de pesos, por parte del Ministerio del Medio Ambiente (MMA).
El objetivo de la iniciativa ambiental fue contribuir a la mitigación del impacto del cambio climático en las comunidades urbanas de Talca, a través del incentivo de talleres prácticos orientados a la valoración del medio ambiente, entre los que destacan: los laboratorios de “Suelo y germinación de semillas nativas”, las charlas sobre: “Arbolado nativo urbano y sus servicios ecosistémicos”; “los beneficios de los micro bosques urbanos”, y los talleres prácticos para “Aprender a identificar especies de insectos y aves polinizadoras”, desarrollados en la Escuela Felipe Cubillos y el Parque Pablo Neruda de Talca, durante este año.
Durante la ceremonia de clausura del proyecto FPA, la representante del Ministerio del Medio Ambiente en la región, Daniela de La Jara, expresó que “como Ministerio del Medio Ambiente queremos felicitar al Club del Árbol por la ejecución del proyecto, recalcando la posibilidad de replicar este esfuerzo en otras áreas de la región. Este proyecto se constituye en un orgullo para nuestro ministerio. El trabajo, la colaboración, la incorporación de la escuela, la academia, de las organizaciones sociales y, por otro lado, del Estado es relevante para poder trabajar esta temática”, declaró la Seremi de La Jara.
En tanto, en el coordinador del proyecto, Diego Urbina, indicó que “el proyecto que ejecutamos tuvo como público objetivo los estudiantes de la Escuela Felipe Cubillos y público en general. Se hicieron talleres con diferentes temáticas, tales como: identificación de flora nativa, donde permitía los niños identificar plantas desde los olores, gusto. También taller de agentes polinizadores que también son factores ecológicos que inciden en los ecosistemas y en la formación de estos habitas en las zonas urbanas”, mencionó el docente y miembro del Club del Árbol de Talca.
Propagar la flora nativa
También, con los recursos asignados, se elaboró una guía sobre biología y ecología de 15 especies nativas, la que incluye información en cuanto a distribución, tipo de hoja, morfología, estado de conservación y usos medicinales. Además, se concretó la plantación de especies de flora nativa en el establecimiento educacional y áreas colindantes.
Asimismo, el proyecto relevó la importancia de avanzar en la creación y aumento de microbosques urbanos como parte de esta infraestructura que buscan articular a la comunidad urbana para generar un sentido de pertenencia ecológico que permita sensibilizar y respetar el medio ambiente de un espacio natural urbano y al mismo tiempo, aumentar la superficie y cuidado del arbolado urbano nativo con el fin de generar en el mediano y largo plazo tendencias positivas para afrontar la crisis climática.